En vísperas de cumplirse el primer aniversario del inicio del conflicto en Ucrania, el Secretario General de la ONU, António Guterres, declaró hoy en la Asamblea General “que la invasión rusa de Ucrania representa un hito nefasto para el pueblo ucraniano y para la comunidad internacional”.
“Esta invasión es una afrenta a nuestra conciencia colectiva. Es una violación de la Carta de las Naciones Unidas y del Derecho internacional. Está teniendo dramáticas consecuencias humanitarias y para los derechos humanos. Y el impacto se está sintiendo mucho más allá de Ucrania”, destacó.
Con relación al intento de la Federación Rusa de anexionarse ilegalmente cuatro regiones de Ucrania- Kherson, Zaporizhzhia, Donetsk y Luhansk-, un tema abordado previamente en la Asamblea General, Guterres recordó el compromiso de la Organización “con la soberanía, la independencia, la unidad y la integridad territorial de Ucrania, dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas”.
A continuación, señaló que aproximadamente el 40% de los ucranianos precisa ayuda de socorro y recordó que la ONU lanzó la semana pasada un llamamiento humanitario de 5600 millones de dólares para el pueblo de Ucrania.
Entre los logros conseguidos por la Organización en medio del conflicto, Guterres citó la evacuación de civiles atrapados en la planta siderúrgica de Azovstal y la creación de la Iniciativa de Granos del Mar Negro, un proyecto que calificó de “importante contribución para hacer frente a la inseguridad alimentaria mundial”.
Las armas nucleares son totalmente inaceptables
Pese a ello, reiteró la grave amenaza que supone “la irresponsable actividad militar en torno a la central nuclear de Zaporizhzhia” y elogió al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) por lograr el compromiso de las partes “para garantizar que la zona siga siendo segura”.
Del mismo modo, destacó que “el denominado uso táctico de armas nucleares es totalmente inaceptable” y reflexionó que “la guerra no es la solución. La guerra es el problema”.
“Los ucranianos, los rusos y otros pueblos necesitan la paz. Aunque hoy las perspectivas puedan parecer sombrías, todos debemos trabajar sabiendo que una paz auténtica y duradera debe basarse en la Carta de las Naciones Unidas y en el derecho internacional. Cuanto más duren los combates, más difícil será esta labor. No tenemos un momento que perder”, apremió.
La Asamblea apoya una solución política
Anteriormente, el presidente de la Asamblea General, Csaba Kőrösi, destacó el “año de desesperación, desplazamientos, destrucción y muerte de una magnitud nunca vista en Europa en décadas”.
“Ocho millones de refugiados repartidos por Europa y más allá. Seis millones de desplazados internos, dos tercios de ellos mujeres y niños, con familias separadas que a menudo desconocen la suerte de sus seres queridos. Millones de ucranianos sin energía, agua ni calefacción en pleno invierno debido al ataque sistemático de las infraestructuras civiles”.
Kőrösi indicó que la Asamblea General mostró su firme apoyo a encontrar una solución política al conflicto cuando adoptó tres resoluciones que aludían al diálogo, las negociaciones, la mediación u otros medios pacíficos.
“Esta guerra llegará a su fin. Y llegará el momento de la reconstrucción, la reconciliación y la transformación. Sabemos que no será fácil. Sabemos que las cicatrices son profundas. La cultura, los lazos familiares, el deporte, las artes y el reconocimiento del destino compartido de la humanidad ayudarán sin duda a las naciones que actualmente se enfrentan en las trincheras”, declaró.
Hasta el momento 77 oradores han solicitado la palabra para intervenir en este debate, que se calcula se extenderá hasta mañana o el viernes por la mañana, y tras el cual se prevé la votación de una resolución en la que se reiterará la petición de la Asamblea General de que Rusia retire sus tropas del territorio ucraniano.